Las papas hasselback (no tengo idea cómo se llaman en español) me fascinan porque quedan demasiado crocantes por fuera y suaves por dentro. Por supuesto, soy fan enamorada de lo crocante pero no como muy a menudo por la cantidad de aceite que se usa para lograr esto.
Sin embargo, en esta receta se usa poco aceite, muchas hierbas y condimentos que las hacen algo espectacular para acompañar cualquier tipo de proteína (las amo con salmón) y con ensaladas también.
Generalmente, las papas son vistas como las malas del paseo porque “engordan”. Es claro que tienen una buena cantidad de almidón y son un aporte significativo de carbohidratos. Pero este tubérculo también aporta proteína, vitaminas, hierro y potasio. Por lo tanto, NO son malas y tienen muchos más beneficios de los que se cree.
La magia de las papas hasselback es que, al abrirlas, todos los sabores de las hierbas, el limón y los condimentos pasan a ser parte de su interior y la inundan de un sabor espectacular. Además, cada ranura tiene su propia cocción y quedan crocantes en distintas medidas…es genial como pequeños detalles pueden cambiar por completo el sabor de un alimento.
El único pero que podrían encontrarle a esta receta, es que se necesita precisión y paciencia para cortar las papas, pues las ranuras deben quedar justo antes del final de la papa, para que esta tenga una cocción adecuada. No obstante, y después de tanto esfuerzo, es gratificante el resultado final.
Recuerden que si hacen este plato, amaría que le tomaran una foto y me la muestren con el tag #macabites en Instagram. Me encanta ver todas sus creaciones.
Acompañamiento perfecto para mis Pimentones Rellenos, mi Curry de Champiñones, mis Nuggets de Pollo con Quínoa, o simplemente solitas con queso por encima.
VIDEO:

Ingredientes
- 8 Papas (yo usé pastusa)
- 3 cucharadas de aceite de oliva
- 8 dientes de ajo con cáscara
- Romero
- Tomillo & Laurel
- Sal & Pimienta
- 1 limón pequeño
Instrucciones
- Precalienta el horno a 220ºC.
- Corta las papas con un cuchillo de buen filo, más o menos con 2mm de distancia entre cada corte (sin llegar al final de la papa).
- Pon las papas en una refractaria o bandeja para hornear.
- Corta el limón y exprímelo encima de las papas.
- Agrega el aceite de oliva.
- Agrega el romero, tomillo, sal y pimienta.
- Con un cuchillo o superficie plana, aplasta los ajos conservando la cáscara y ponlos en la refractaria.
- Agrega las hojas de laurel.
- Introduce las papas al horno.
- Después de 20 minutos, saca los dientes de ajo para que no se quemen.
- En total, deja cocinar las papas por 1 hora más o menos (o deja un poco más si es necesario) *
- Agrega más hierbas al gusto cuando las saques del horno.
TIPS:
- * Los tiempos en el horno pueden cambiar según el tamaño de las papas. Yo usé papas pequeñas-medianas. Si las tuyas son grandes, debes dejar más tiempo para que se cocinen bien.
- Si dejas las papas más tiempo en el horno, debes estar más pendiente porque pueden quemarse fácilmente.
- ¡Puedes añadir la cantidad de condimentos que se te ocurran! Como paprika, ají en hojuelas, etc. Además, al final puedes añadir un poco de tu queso favorito y quedan deliciosas.
- Son excelentes también con guacamole o cualquier tipo de salsa.
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